Sección Oficial. Joe Strummer: The Future Is Unwritten, de Julien Temple
En La Ciudad De Sylvia, de José Luis Guerín
Julien Temple regresa al Festival de Gijón siete años después de su estupendo documental The Filth and The Fury y en esta ocasión lo hace dentro de la Sección Oficial a concurso y con otro documental bastante emparentado con aquel por cuanto se centra en la figura de Joe Strummer, el que fuera líder de The Clash, compañeros generacionales de los Sex Pistols y verdadero grupo insignia del punk británico. Temple, un director con un estilo efectista y algo torpe cuando se adentra en terrenos de ficción, vuelve a demostrar que se convierte en maestro en el campo documental y Joe Strummer: The Future Is Unwritten es prueba de ello.
Julien Temple ofrece un recorrido por la vida de Strummer, desde su infancia hasta su fallecimiento, ocurrido en el año 2002 a la edad de 50 años. El suicidio de su hermano mayor adolescente, la gestación de The Clash, el ascenso a la fama y el reconocimiento, tanto en el Reino Unido como en EE.UU., el progresivo deterioro de las relaciones personales entre los miembros de la banda, la pérdida de horizontes y la depresión que Joe Strummer sufrió cuando The Clash llegó a su fin y el posterior reencuentro del cantante y guitarrista consigo mismo, todo ello está narrado con el ritmo vibrante habitual en Temple. El director de Absolute Beginners utiliza abundante material de archivo que funde con imágenes de animación y con testimonios de una amplia galería de personajes, que incluye a Bono, Matt Dillon, Steve Buscemi o Jim Jarmusch entre otros muchos.
Xavier Lafitte y Pilar López de Ayala en En La Ciudad De Sylvia
José Luis Guerín, en cambio, es un artista. Al menos él tiene esa concepción de sí mismo y parece encantado de haberse conocido. En la presentación de su filme En La Ciudad De Sylvia ya dio buena prueba de ello y consiguió llenar de pedantería y tiempos muertos una alocución de apenas unos minutos, lo que ya avanzaba el estilo de su último trabajo y, en general, de toda su filmografía.
En La Ciudad De Sylvia, avisó, es una película no narrativa. Ciertamente no lo es, igual que no es otras muchas cosas. En realidad Guerín se limita aquí a poner una camara en medio del recorrido de un personaje que se dedica a seguir a una chica (Pilar López de Ayala) durante casi una hora para comprobar que no es aquella que busca. Con una casi total ausencia de diálogos, José Luis Guerín demuestra que al menos es sincero y su película da aquello que promete, independientemente de que con ello tenga algún interés. En su favor hay que decir que consigue en ocasiones llegar a intrigar y crear una cierta expectación por lo que ocurrirá, algo que se derrumba en un final aleatorio y gratuito que convierte en pérdida de tiempo todo lo anterior.
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