Las Vidas Posibles De Mr. Nobody, de Jaco Van Dormael

Hace casi veinte años que se estrenó en España Totó el héroe, la primera película del director belga Jaco Van Dormael y que recibió buena acogida por la crítica. Hace catorce se estrenó El octavo día, segundo trabajo de Van Dormael con una acogida ya no tan buena. Ahora llega a las pantallas su tercera realización, Las vidas posibles de Mr. Nobody, estreno de fechas veraniegas que pasó el otoño anterior por el Festival de Sitges y que está protagonizada por los reconocidos Jared Leto, Sarah Polley y Diane Kruger.

No ha habido unanimidad en el recibimiento al artefacto de Van Dormael. No cosechó grandes parabienes en Sitges pero me ha sorprendido encontrar ahora buenas valoraciones por parte de críticos tan poco propensos a los vanguardismos y las moderneces como son Carlos Boyero o Rodríguez Marchante. Y es que Las vidas posibles de Mr. Nobody no es plato para todos los gustos y ni siquiera está claro que esté bueno.

Jared Leto y Diane Kruger en Las Vidas Posibles De Mr. Mobody

La película, de argumento confuso e inclasificable pero que puede ser que trate de los distorsionados recuerdos del último hombre mortal en los momentos finales de su vida en un futuro próximo, está hecha se diría que con el único objetivo de sacudir al espectador a base de un montaje -visual y sonoro- brillante y pomposo pero que, desafortunadamente, va perdiendo fuelle según avanza su injustificadamente alargadísimo metraje. Mientras le dura la cuerda del interés, la historia de Mr. Nobody se sigue con lejana e inofensiva curiosidad. Incluso permite disfrutar de los millones de heterogéneas referencias cinéfilas metidas con mayor o menor acierto y que dan la posibilidad de jugar a adivinar la película de la que está fusilado cada plano-homenaje. Después de 2001: una odisea del espacio, Harold y Maude, Lawrence de Arabia o Nueve semanas y media creo que perdí la cuenta y ya sólo tenía deseos de que llegara el final de la historia. Y el final, como casi todo lo que antecede, es gratuito y olvidable con efecto inmediato.

En el capítulo interpretativo, Jared Leto se pasa la mitad del filme enterrado bajo kilos de grotesco maquillaje y la otra mitad poniendo cara de pasmo. Por su pate, Sarah Polley y Diane Kruger deambulan por el relato tan perdidas y desubicadas como los propios personajes que interpretan. En resumen, Las vidas posibles de Mr. Nobody se termina revelando como puro fuego de artificio revestido de intrascendente grandilocuencia. Apabullante intento de no se sabe muy bien qué realizado no se sabe muy bien cómo que naufraga sin remisión en las procelosas aguas de su propia vacuidad.

Las Vidas Posibles De Mr. Nobody. Trailer.


Las Vidas Posibles De Mr. Nobody. Trailer Español.